La acción puede especiarse con un poco de juego anal. No olvidemos que el clítoris y el ano están conectados por el perineo y que el esfínter se contrae durante el orgasmo en combinación con los músculos de la pelvis. Es decir, la región anal interviene también en el proceso de respuesta sexual y está conectada con la red clitoridiana.
Tal como sucede con el cunnilingus, con un poco se puede llegar muy lejos, y la estimulación anal no constituye una excepción.
- Hasta el momento hemos estimulado el perineo y la zona situada alrededor del ano. Ahora acaricia el ano con la punta del dedo e introdúcelo ligeramente (sólo la punta). Nada más penetrar la zona anal debes sentir la contracción de los esfínteres.
- Mantén el dedo en esta posición durante el orgasmo.
Para estimular el ano puede ser necesario un poco de ese lubricante que conviene tener a mano. Normalmente no será necesario, pues parte de la humedad de la vulva habrá llegado al perineo y se habrá introducido en la región anal, pero no está de más estar preparado.
- Para estimular el ano sírvete de un dedo que no hayas usado en la estimulación de la vulva, con el fin de no transmitir bacterias de una región a otra. Lo mejor es emplear el pulgar de la mano con la que estás sujetando las nalgas. Adopta una postura cómoda para que puedas introducir fácilmente la punta del pulgar en el ano al tiempo que sujetas las nalgas.
- Puedes usar también el meñique o el anular de la mano con la que estás estimulando la vulva, dos dedos que no suelen intervenir y que pueden desarrollar un papel activo.
Es oportuno señalar que, si bien el cunnilingus es un modo de expresión sexual generalmente aceptado, la estimulación anal se considera excesiva, aunque existe una gran diferencia entre introducir la punta de un dedo y practicar el coito anal. Si es la primera vez que lo practicas, juega un poco con el dedo en toda la zona para que ella entienda que te estás acercando y entrando. Si notas que se siente incómoda, no insistas; no vale la pena estropear una buena sesión de cunnilingus.
REPASEMOS
En este capítulo hemos apuntado el papel que desempeña la región anal en el proceso de respuesta sexual y el tipo de estimulación más adecuada en combinación con el cunnilingus. Recuerda que estimulación no es penetración; la estimulación anal puede reforzar notablemente la intensidad del orgasmo, pero también puede inhibirlo si es excesiva.