32 Interludio

PREGUNTA: “A mi novia le encanta el sexo oral, aunque a veces se queja de sentirse sola mientras se lo ofrezco. ¿Es algo raro?” (Rob, 29 años).

RESPUESTA: No, su sensación de soledad no es del todo infrecuente. Aun cuando el cunnilingus es una intensa experiencia física, puede ser que ella se sienta un poco alejada de ti. Intenta colocar una de sus piernas de manera que tu pene repose sobre la cara interior de su muslo. Acaríciale el vientre con la mano libre. Busca un mayor contacto entre tu cuerpo y el suyo. Y aunque estés concentrado en su vulva, ten en cuenta que allí hay una mujer completa, por lo que debes hacer un esfuerzo adicional para verbalizar tus sensaciones y mantener la conexión.

TIEMPO MUERTO

Los movimientos en forma de gancho descritos en el capítulo anterior ofrecen una excelente ocasión para apartarnos brevemente del cunnilingus y centrarnos en otro tipo de estimulación, suponiendo que ella lo autorice:

  • Sin dejar de estimular el nódulo clitoridiano, colócate de rodillas, abrázala de costado y besa su estómago y sus pechos; también puedes besarla en la boca, si ella no se opone, pero ten cuidado: igual que no a todos los hombres les agrada la idea de besar a una mujer después de que ella haya estado estimulando su pene, muchas mujeres prefieren no besar una cara húmeda que acaba de estar en la vulva.
  • Para disfrutar de este interludio puedes tener a mano una toalla o alguna de tus prendas (camiseta, por ejemplo) y secarte rápidamente la cara. También puedes darle palmadas en la cara interior de los muslos y ligeros toques en la vulva.

LA COMBINACIÓN PERFECTA

El interludio es una oportunidad excelente para refrescarte el paladar con un par de sorbos de vino. Tal como señalamos en la Primera parte, el nivel de pH de la vagina es curiosamente similar al del vino, de ahí que el cunnilingus y el fruto de la uva resulten una combinación perfecta. Bebe un blanco seco o un tinto ligeramente ácido para estimular tu lengua.

Si además de entregarte por completo a tus sentidos no te importa reparar en gastos, opta por un buen vino aromático con olor a fruta y miel y combínalo con el dulce néctar de su vulva; será lo más parecido a la ambrosía, el alimento de los dioses. Al margen de cuál sea tu elección, comparte el vino con ella antes de volver a lamer su vulva. Pero recuerda que durante este intervalo los dedos deben permanecer en posición de gancho dentro de la vagina. Mantén la presión sobre el nódulo clitoridiano y disfruta de todas tus libaciones.

REPASEMOS

La presión con los dedos en gancho es ideal para un breve interludio en la sesión de cunnilingus. Vuelve a conectar con la parte superior del cuerpo de tu pareja y disfruta de otros modos de estimulación antes de reanudar el proceso.